USADO. Este estudio del profesor William Thayer, amigo y colaborador directo del Padre Hurtado en la Acción Católica y el campo obrero, examina un periodo decisivo y poco conocido en la vida del santo jesuita. Se trata del momento que Chile vivia hacia fines de 1947, envuelto en las tensiones mundiales de la posguerra, con Europa destruida y la URSS transformada en superpotencia mundial, controlando la Europa oriental parte de Asia y con poderosa presencia en Occidente, el Tercer Mundo y Naciones Unidas. La situación de Italia y la Ciudad del Vaticano cran especialmente delicadas. Si el Partido Comunista italiano derrotaba al gobernante Demócrata Cristiano, la Cortina de Hierro se correria hacia el Occidente, dejando al propio Papa y la Santa Sede «geogråficamente» bajo control comunista. Entre tanto en Chile, el Presidente González Videla, que habia triunfado con el apoyo del Partido Comunista chileno se encontraba en grave conflicto con él y preparaba un proyecto de ley sobre Defensa de la Democracia que, entre otros efectos, tendria el de descabezar el sindicalismo obrero chileno. dominado abrumadoramente por el comunismo, gracias al sistema de sindicatos únicos de empresa, que afiliaban forzosamente a todos los obreros de ella. Pero ocurria que dichos sindicatos cran presionados en sentidos contrapuestos: politicamente, el comunismo pugnaba por hacerlos servidores de la revolución social que, encabezada por la URSS, pretendia establecer la dictadura del proletariado; legalmente, los sindicatos constituían los órganos de representación, defensa y negociación colectiva de los obreros. Ahora bien, entre ellos, los de militancia cristiana, cran falangistas y de la Juventud Obrera Católica, pero ambos grupos observaban estupefactos los conflictos entre las directivas de la Falange Nacional y de la Juventud Católica, con el Arzobispado de Santiago. Asi las cosas, el Padre preparó un minucioso, aunque no extenso «memorial», explicando a S.S. Pio XII lo que ocurria en Chile, donde el incendio ardia por todos los costados, comprometiendo Gobierno, empresas, sindicatos, Iglesia, partidos politicos, juventud y el fiero combate nacional e internacional entre democracia y comunismo. Con este documento y la debida aprobación de sus superiores, partió a Roma a tratar directamente con el Papa lo que a su juicio habia que hacer. La entrevista tuvo lugar el 18 de octubre de 1947. Los detalles y el desenlace de csa etapa histórica y trascendental son el tema de este ensay apasionante y singular.

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