TAPA BLANDA, LIBRO USADO, RECUERDA QUE EL 10% DE ESTA VENTA COLABORA CON FUNDACIONES QUE FOMENTAN LA LECTURA EN ZONAS VULNERABLES. Fue en ese momento que Rasmus me miró directamente y me dijo que bailáramos. Es decir, él y yo solos. Hubiera sido más fácil si hubiese sido con más niños. Pero él pensaba que teníamos que ser los dos no más. Me dio vergüenza y me empecé a reír. Y al principio no quería. «No, Rasmus, por favor», murmuré y sentí que me ponía rojo. No sé por qué. Pero era como demasiado. «¿Qué?», Rasmus me miraba un poco confundido. «¿Por qué no? ¿Tengo mal olor o qué?».

Calificación del estado de los libros:

Translation missing: es.general.search.loading